Leer más (o mejor), es uno de los objetivos comunes que nos ponemos a cada comienzo de año. La meta es recorrer nuevas historias, apropiarnos de nuevo conocimiento y motivarnos a continuar caminos o a emprender nuevos.

La lectura es un hábito sano, interesante y con cientos de beneficios. Justamente por esto, periódicamente, en Momentos Felices te invitamos a formarlo con notas sobre libros de diversa índole. Desde libros para leer un fin de semana, una selección de especiales de 2021, e incluso algunos para reducir la ansiedad.

Como todo hábito, la lectura merece una cierta práctica, una reflexión para ser mejorada y una serie de elementos que te permitan motivar a mantenerlo. En esta nota te contamos sobre algunos tips para leer más y mejor:

1. Adiós a las distracciones

 

 

Comenzamos esta serie de recomendaciones con, quizás, la más difícil. Es común encontrarnos con la sensación de «no tener tiempo» para leer. El trabajo y la rutina diaria muchas veces dejan pocos espacios para momentos de ocio.

Sin embargo, también es muy común encontrarnos con que esos momentos de ocio los gastamos en entretenimiento rápido. Ya sea mirando videos de YouTube (que posiblemente ya hayas visto) o controlando las redes sociales, es tiempo que podrías destinar a la lectura.

Claro que no es simple, estamos acostumbrados a mirar el celular durante horas (y las redes cada vez se hacen más adaptables al consumo profundo de las mismas). La clave estará en encontrar un equilibrio para darle un espacio y tiempo a la lectura.

Notarás de inmediato un cambio en tu hábito al dedicar más tiempo a leer y menos tiempo al uso de celulares, tv o internet.

 

2. Ejercitá la lectura

 

 

Tal como si estuvieras por comenzar una nueva alimentación o rutina en el gimnasio, pasar de 0 a 100 es poco recomendable.

Lo esencial es buscar un espacio en tu rutina e incluso fijarlo como si fuera sagrado. Puede ser durante la pausa del trabajo o simplemente entre actividades: fijar una hora de lectura es lo ideal.

Al igual que cualquier cambio de hábito, la lectura necesita práctica y desarrollarse en el tiempo por lo que comenzar con 10 minutos diarios para luego ir escalonando también es una buena idea.

 

3. Variá las temáticas

 

 

A menos que seas amante de un género en particular, otra de las sugerencias simples es variar los temas de cada lectura.

Encontrar una historia interesante, de esas con conexiones profundas, no se da en cada libro. Por lo que, si te aburre un género, cambialo por otro.

En este mismo sentido, es necesario decir que terminar cada libro que comenzamos no es obligación. Al igual que una serie que no te interesó en su primera temporada, puedes desechar un libro que no te interese en su primer capítulo.

Continúa con el siguiente en la lista. Hay millones de libros interesantes para que puedas ahondar y encontrar historias que te acompañen.

 

4. Lee en compañía

 

 

Otro motivador para fomentar el hábito puede ser comenzar a leer a la par de una amiga/o. Socializar las lecturas es una forma muy interesante para compartir y animarnos a continuar leyendo.

Ya sea con alguien cercano o en un club de lectura (en Uruguay hay varios), encontrarás un sentido nuevo a la reflexión en grupo sobre algo que leíste. Ahondar en la biografía del autor, observar otras perspectivas sobre un suceso narrativo y otras decenas de emociones pueden surgir en esa compañía.

 

5. Un ritual especial

 

 

Claro que, cumplir con cualquiera de los 4 tips anteriores, será de muchísima utilidad para formar tu hábito de lectura. Si a alguno de estos le agregamos la posibilidad de convertirse en un «ritual», aún mejor.

Por ejemplo, encontrar un espacio en tu casa donde leer te sea cómodo y que puedas acompañar de una música de tu interés o simplemente, un té o café especial. Darle más valor a este momento te permitirá que se convierta en una prioridad y que disfrutes cada minuto del mismo.

 

6. Optimizá tu lectura

 

 

Hay a quienes la práctica los ha hecho maestros. Personas que leen con tal velocidad que se permiten un festín de lecturas diversas, con la misma profundidad de análisis que quienes se demoran un poco más.

Leer, finalmente, se trata de eso: práctica. Como tal, también existen algunos tips para poder optimizarla o ser más eficiente:

  • Llevar tu libro a donde vayas: siempre existen micromomentos que nos permiten leer y avanzar en la lectura.
  • Lee en forma de pirámide: Al finalizar un libro, busca sus fuentes o referencias para ahondar aún más en la temática.
  • Disfruta de la lectura: no pienses en que debes terminar el libro en cierto tiempo. Disfrutá de cada párrafo, la velocidad vendrá sola.
  • Si disfrutás de un/a autor/a, profundizá sobre sus obras. Notarás patrones de escritura que te darán nuevas ideas y quizás la posibilidad de conectar historias.

 

7. Elegí libros que te gusten

 

 

Claro que lo esencial de todo lo anterior será practicarlo con libros que realmente llamen tu atención. Por eso, también te dejamos algunas notas recomendables para que descubras nuevas historias literarias: